Frankenweenie [6]
(EE.UU., 2012, 87 min)
Dirección:
Tim Burton
Guión:
John August
Intérpretes (v.o.):
Charlie Tahan
Catherine O’Hara
Martin Short
Martin Landau
Winona Ryder
Tim Burton se ha dormido en los laureles. Sus películas siguen siendo visualmente sobresalientes y tienen grandes momentos, pero Burton no se esfuerza nada por renovarse, por contar nuevas historias manteniendo su personalidad, algo que a mí me parece fundamental para que un director no se oxide. El problema es que actualmente es muy difícil que Burton quiera reverdecer sus laureles porque haciendo lo que hace logra reventar taquillas, que es lo que hizo con “Charlie y la fábrica de chocolate” y “Alicia en el País de las Maravillas”; o tiene buenas críticas, como ocurrió con “La novia cadáver”, “Sweeney Todd” o ésta. (La excepción es “Sombras tenebrosas”, que no funcionó excesivamente bien ni con la crítica ni con el público, aunque no se dio un batacazo.) Si Hollywood le da carta blanca para dirigir lo que él quiera porque sus películas son éxitos, ¿qué necesidad tiene de arriesgarse si le va muy bien sin hacerlo?
“Frankenweenie” es un remake de un cortometraje de 1984 que Burton dirigió mientras trabajaba para la Disney, y era un homenaje muy tierno a “El doctor Frankenstein” (1931), de James Whale, sobre un niño que resucitaba a su perro, y que apuntaba muchísimo a lo que Burton lograría más tarde. Para el largometraje, Burton ha decidido dejar el guión del corto casi intacto, hinchar la duración con subtramas que no acaban de funcionar, y convertirla en una película de stop-motion. Después de haberla visto, sólo puedo decir que el cortometraje me parece bastante mejor que el largometraje.
Si no conociera a Tim Burton ni la anterior versión, “Frankenweenie” me hubiera gustado mucho más. Ésta me parece poco emocionante porque conozco la trama y no hay sorpresas, porque muchas ideas me parecen ideas recicladas de otras películas de Burton, y porque los muñequitos del stop-motion transmiten muchísima menos emoción que actores de carne y hueso (y bueno, que los niños sean deformes tampoco ayuda mucho. ¡No me extraña que Victor no encajara, si era el único normal!)
De la trama principal, me gustan dos novedades: que cuando Victor parece que por fin va a encajar, durante el partido de baseball, es cuando matan al perro; y el profesor de ciencias, que dice cosas muy buenas sobre cómo es la masa. Y de las nuevas tramas, me gusta cuando los chavales se ponen a resucitar a sus mascotas, que son unos minutos muy buenos… y completamente nuevos.

Con las nuevas tramas, Burton está constantemente apuntado a cosas que no llevan a nada (como los flamencos del alcalde, o las minas donde murió gente), unas cuantas están sin explicar (como por qué es tan importante para los chicos el proyecto de ciencias, o por qué las mascotas resucitadas son así —está mínimamente justificado con lo que dice el profesor de ciencias—), y otras muy importantes se quedan a medias (como cuando Victor demuestra que puede encajar, que es un elemento importantísimo muy poco marcado). Y el personaje de la vecina sobra.
El final tiene un problema de estructura: al querer mantener el final original, se produce una resolución muy anticlimática porque todo lo que ha pasado en la feria es mucho más espectacular que lo que sucede en el molino.
Tim Burton, por Dios, ¡despierta!
Tienes un punto muy acertado, la verdad es que los proyectos cinematográficos de Burton siembre ofrecen lo mismo, es decir el tema gótico y fantástico, sin embargo en cada una de sus películas te sorprende en el caso de Frankenweenie lo rescatable es que es un homenaje claro y muy bien llevado de un clásico del Cine de terror y lo segundo es que de nuevo vuelve a retomar una técnica de animación que lo ha llevado al éxito me refiero a la del stop-motion lo que hace que esta cinta se disfrute visualmente, no se la pierdan es muy buena.
Esta peli está muy bien si no conoces el cine de Tim Burton, porque realmente es un refrito de ideas desarrolladas en otras películas. Pero así y todo sí merece la pena verla.