Light Through Fog [7]
Light Through Fog
(EE.UU., 2009, 27 páginas)
Holly Lisle
En su magnífico cursillo para ser escritor, “How to Think Sideways”, Holly Lisle explicaba cómo cumplir con una fecha límite y entregar una obra acabada, incluso cuando tu agenda estuviera tan apretada que apenas tuvieras tiempo para escribir. Para explicarlo, Lisle lo puso en práctica: mientras escribía las lecciones, en semanas en las que trabajaba 70 horas, una editora se puso en contacto con ella para que escribiera un cuento largo para la colección “The Mammoth Book of Paranormal Romance”, y aunque el contrato no era muy allá, Lisle aceptó y escribió “Light Through Fog”. El cuento apareció por primera vez en 2009 en esa colección, y ahora se puede adquirir de forma independiente en formato digital.
Sarah es una joven viuda, que todavía no se ha recuperado de la inesperada muerte de su marido Sam, que tiene que hacer frente, sola, a la educación de dos niños pequeños. Tras el funeral, Sarah va a un cumplir un deseo que se hicieron prometer: que en cuanto uno de ellos muriera, el otro depositara las cenizas bajo su árbol; un viejo roble situado en una pequeña isla dentro del jardín. Allí construyeron una caseta que colocaron entre las ramas, y allí vivieron los momentos más felices de su vida. Y cuando Sarah está a punto de depositar las cenizas, una voz la sorprende, una vez que se parece demasiado a la de Sam, porque puede que Sam no la haya abandonado del todo (ni Sarah a Sam).
“Light Through Fog” destaca por lo bien que Lisle muestra el dolor que siente esa mujer, tanto al principio como más adelante, cuando todos los adultos le dan la espalda y ella decide seguir adelante, sabiendo que está haciendo lo correcto. Y la parte paranormal es absolutamente genial por lo original, sorprendente y bonita que es.
Supongo que éste, el seguir adelante, es un tema que le toca muy de cerca a Lisle, porque en su “Mugging the Muse: Writing for Fun and Profit”, contaba cómo le sucedió algo parecido (aunque bastante más terrible por lo que hizo su marido) y se quedó completamente sola y con dos niños pequeños, y ella continuó con su sueño de ser escritora y nunca abandonó, hasta que lo consiguió y demostró al resto que estaban equivocados. A mí me parece que el tema es tan personal que estropea un poco el cuento, porque a Lisle se le va un poco de las manos: la situación de partida (la sorpresa paranormal) es excelente, y también una situación que se da a mitad (cuando ella decide seguir adelante teniendo a todos en contra); pero en cuanto se resuelve el conflicto, el cuento dura demasiado para dejar clarísimo que ella estaba en lo correcto.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?