Zombieland
(EE.UU., 2009, 88 min)
Dirección:
Ruben Fleischer
Guión:
Rhett Reese
Paul Wernick
Intérpretes:
Woody Harrelson
Jesse Eisenberg
Emma Stone
Abigail Breslin
En cine, y me temo que en otras artes, se da la errónea idea de que lo verdaderamente original es lo bueno; lo que provoca que la gente que empieza busque ser original a toda costa; esta idea equivocada es la razón, también, por la que los críticos premian las rarezas y desprecian lo convencional, aunque sea una obra de artesanía perfectamente realizada. Para buscar la originalidad, el truco está en narrar una historia de la forma mas efectiva posible, dándole algunos giros para que no parezca una copia de una anterior. El año pasado, sin ir más lejos, se estrenaron “
Lluvia de albóndigas”, “
Avatar”, o “Bienvenidos a Zombieland”, que partiendo de premisas conocidas, lograron hacer películas completamente originales (y sí, las tres tienen la eficaz estructura en tres actos, la que a los modernos les gusta despreciar por supuestamente manida).
“Bienvenidos a Zombieland” relata cómo una plaga de zombis ha asolado la Tierra y los pocos humanos que quedan tienen que ingeniárselas para sobrevivir mientras buscan un lugar sin muertos vivientes. ¿Suena familiar, no? Especialmente ahora que el género de zombis está de moda. ¿Pero, qué es lo que hace que esta película no sea más de lo mismo? El humor: “Bienvenidos a Zombieland” es una simpatiquísima comedia de terror que no se toma a sí misma en serio.
El film empieza de una forma muy dinámica con el protagonista, un chico aficionado a los videojuegos que no tiene amigos, contando en voz en off y con mucha ironía, una serie de reglas para sobrevivir a los zombis. La pantalla está llena de títulos integrados mientras se ve cómo las personas que no siguen las normas, caen en manos de los muertos vivientes.
 |
Jesse Eisenberg, Emma Stone,
Abigail Breslin y Woody Harrelson |
La voz en off se mantiene durante toda la película, al igual que los títulos integrados. Y a lo largo del metraje, van apareciendo flashbacks para contar el pasado de los protagonistas, que suelen ser humorísticos. Es imposible que el protagonista sepa todas las cosas que cuenta, pero ¿qué más da? Lo importante es pasárselo bien. Hay un par de flashbacks, muy interesantes, que hacen que cambie la percepción que tienes del personaje de Woody Harrelson.
El humor tiene tanta importancia que muchas veces los zombis desaparecen por completo y la película se convierte en una comedia; en una road movie que se centra en las relaciones de los cuatro protagonistas. Por ello, otras de las claves de su éxito es el reparto, especialmente los chicos (sus personajes dan más juego que los de ellas), que se compenetra muy bien. Y hablando de humor, hay, a mitad del metraje, un momento divertidísimo cuando los protagonistas van a Hollywood y se cuelan en la casa de una estrella de cine (no voy a decir quién es, aunque ya lo han destrozado en muchos sitios).
Técnicamente la película está muy bien hecha, y director domina el tempo. Los ataques de los zombis duran lo que tienen que durar; los momentos más desagradables los deja fuera de campo y la tensión en el primer encuentro entre los dos chicos y luego entre los chicos y las chicas está muy bien conseguida (de la escena entre Harrelson y Eisenberg me encanta una acción hecha en montaje: cuando, durante el duelo, pasan a plano general y vuelven a apuntarse).
El fallo que tiene la película es el guión. Da la sensación de que los guionistas empezaron a barajar varias escenas divertidas que se podrían meter en una película de zombis, y al final decidieron encajar todas un poco con calzador. No tiene mucho sentido que las chicas quieran ir a un parque de atracciones (pero mola mucho); o que se cuelen en una mansión en Beverly Hills (pero también mola); o que decidan destrozar una tienda de souvenirs indios (pero cómo mola); o que les llegue un arsenal caído del cielo, o que las chicas cambien de opinión y decidan ayudar a los chicos de buenas a primeras. Pero “Bienvenidos a Zombieland”, que no tiene otra aspiración que hacer pasar un buen rato, es tan divertida y simpática que se lo perdonas.
Yo me lo pasé en grande. Hacia mucho tiempo que no salía del cine con una sensación de agradable bienestar como la que me proporcionó ¡una película de zombies! Mis respetos para Up y Avatar, pero en ambos casos me dieron lo que esperaba, que era mucho.
Una peli de zombies diferente, está genial. Hay otra diferente pero comedia tambien que no estoy segura si se titula "zombies party"….
No me suelen interesar los zombies, pero esta película sí que es divertida.