Fish Tank
(Reino Unido, 2009, 123 min)
Dirección y guión:
Andrea Arnold
Intérpretes:
Katie Jarvis
Kierston Wareing
Michael Fassbender
Rebecca Griffiths
De cara a la crítica y a los festivales, el cine realista lo tiene más fácil que otros. La gente parece que es más proclive a pasar por alto incongruencias narrativas y exageraciones pesimistas si por debajo hay un comentario social. Este tipo de cine también sirve para acallar conciencias: el público objetivo no es precisamente el que retratan estas películas, sino los burgueses, que hacen poco para acabar con las situaciones injustas mostradas en estos films, pero que se sienten mejor por haber dedicado unos minutos a reflexionar sobre esas injusticias. Por este motivo la increíble y exagerada “Alemania año cero” de Rossellini está considerada una obra maestra. Y Ken Loach tiene tanto prestigio, aunque a veces sus películas parezcan más ciencia ficción que las de James Cameron. En España pasa con Fernando León. No estoy diciendo que todo el cine realista sea malo, pero sí que por el simple hecho de serlo, hay personas que va a pensar que es bueno, sin pararse a ver los valores reales que tiene.
“Fish Tank” pertenece a esa corriente. El año pasado ganó en Cannes en Premio del Jurado y en febrero el Bafta al Mejor Film Británico, desbancando a “
An Education”. Tiene unas críticas excelentes y supongo que si hiciera una encuesta a la salida del cine, el público (burgués) estaría encantado con lo que ha visto.
Mia es una adolescente conflictiva que vive en un barrio humilde de Essex con su madre alcohólica y su hermana pequeña. A Mia le encanta bailar, y decide prepararse para una audición. Un día aparece por casa el nuevo novio de su madre, y Mia se enamora de él.
La película está muy bien dirigida escena a escena. El reparto es impresionante, sobre todo la debutante Katie Jarvis, y la puesta en escena (la dirección artística es estupenda) y la planificación son muy buenas. Los planos están muy bien compuestos, hechos con mucho cuidado, y los seguimientos con la cámara por las calles le da mucho dinamismo. Toda la película transmite muy bien la sensación de realidad, y hay momentos entre Jarvis y Michael Fassbender, que interpretaba al novio de la madre, que funcionan muy bien. La directora, Andrea Arnold, tiene un Oscar por un cortometraje (“Wasp”, 2003. El Oscar lo ganó en 2005), y desde luego aquí demuestra que dirige muy bien las escenas.
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Katie Jarvis y Michael Fassbender |
Otra cosa son sus cualidades como guionista y su capacidad para ver el conjunto. Me parece muy bien que quiera meter a una yegua atada como metáfora de la situación de Mia, pero de alguna debería justificar que la chica se cuele en una propiedad privada e intente liberarla. O que Mia encuentre a un chico de su edad del que se enamora. Pero claro, si en la presentación del chico, él y sus amigos casi dan una paliza a Mia, el principio de la relación es muy difícil de creer. También es increíble que Mía se cuele en una casa sin ningún motivo, simplemente para que de forma forzadísima descubra una información que hace avanzar la trama. O el secuestro de la niña, que no sé quien se lo puede creer. Arnold se saca demasiadas cosas de la manga.
Luego hay dos sorpresas que Arnold prepara y se guarda hasta el final, pero que son muy previsibles.
A la película le sobra un cuarto de su metraje. Tarda demasiado en empezar porque Arnold se va por las ramas (parece más interesada en las chicas que bailan o el negro que le da la sidra y hace volteretas, que en contar que a Mia la han expulsado del colegio), y el primer conflicto que presenta, que Mia se enamora del novio de su madre, no varía durante una hora. También tarda mucho en meter otro elemento, lo de la audición. Y durante demasiado tiempo, la acción no se mueve (aunque las escenas estén muy bien hechas).
Andrea Arnold. Dadle un buen guión y hará una gran película.
Vaya, creí que había publicado y no era así.
Bueno, decía que se me hizo ligeramente larga, pero no me hizo perder el interés en ningún momento.