To Be a Woman [1]
Piers Anthony es un escritor muy prolífico de ciencia ficción y fantasía, cuyas novelas más populares son las de la saga del mundo de Xanth (ya solo esa serie comprende 38 novelas). “To Be a Woman” es una novela corta de ciencia ficción y erótica sobre un robot femenino que adquiere conciencia humana. Aunque intuyo las buenas intenciones de Anthony, el resultado es demencial.
Banner Thomkins es un chico de 18 años que tiene ganas de echar un polvo. Para ahorrar, decide contratar los servicios de la empresa FEMDROID, que está especializada en robots prostitutas, y que ofrece el primer polvo gratis. Banner queda encantado con el servicio. Pasan seis años, y tras un accidente en el ejército que le ha condenado a tener una nariz postiza que echa para atrás a las chicas, Banner decide volverse a poner en contacto con la empresa. Banner quedó tan prendado del robot Elasa, que quiere exactamente el mismo modelo. La empresa le presta gratis durante un mes un modelo mejorado, pero con los recuerdos de hace seis años, con la condición de que muestre en público que es un robot, para hace publicidad a la empresa. Durante ese mes, Banner se enamora del robot.
Lo único que me gusta de “To Be a Woman” es el concepto de que Elasa, el robot, adquiere conciencia por amor; el resto no hay por dónde cogerlo.
Empezando por que parece que para Anthony ser mujer significa ser la perfecta ama de casa que folla como una loca; y siguiendo con una trama pésima: da la sensación de que al autor se le iban ocurriendo ideas sobre la marcha, y las iba encajando como buenamente podía, sin después molestarse en reescribir buena parte de la novela para que tuviera sentido y lógica. El conjunto es muy caótico, lleno de situaciones inverosímiles, y los personajes no tienen ninguna coherencia.
La primera sorpresa es muy previsible (¿y quién se va a creer que el chico folle delante de la otra mujer de la empresa?); aunque Banner está impresionado con el robot, tarda seis años en repetir; es demencial que Elasa vaya enseñando las tetas en un supermercado; es demencial que para conseguir gasolina, cuando Elasa ya tiene conciencia humana, decida prostituirse y que Banner esté tan feliz (es tan demencial que él decide también prostituirse).
Está claro que el encuentro con la abogada se le ocurrió a Anthony después de escribir la primera escena donde aparece (¿por qué no les contó que era abogada y en el viaje y planificaban la defensa ahí?). No tiene sentido que nadie le haya contado a Banner que Mona, la hija del abogado, estaba preparando la defensa. No tiene sentido que nadie reconozca a Elasa en el juicio, por mucha peluca pelirroja que lleve. Y es hilarante cómo Anthony quiere justificar que el abogado quiera a su hija en el juicio: parece que la quiere ahí para que el jurado la magree estando en ropa interior y para que enseñe las tetas.
Lo del ménage à tríos no está justificado (yo diría que, como con todo el sexo que aparece aquí, es una fantasía personal de Anthony), y al final, después de tanta guerra, resulta que Elasa voluntariamente quiere volver a la empresa.
Lo peor es que no es ni entretenida.
. COMO DESARROLLAR INTELIGENCIA ESPIRITUAL
EN LA CONDUCCION DIARIA
Cada señalización luminosa es un acto de conciencia
Ejemplo:
Ceder el paso a un peatón.
Ceder el paso a un vehículo en su incorporación.
Poner un intermitente
Cada vez que cedes el paso a un peatón
o persona en la conducción estas haciendo un acto de conciencia.
Imagina los que te pierdes en cada trayecto del día.
Trabaja tu inteligencia para desarrollar conciencia.
Atentamente:
Joaquin Gorreta 55 años