Toy Story 3 [9]
Toy Story 3
(EE.UU., 2010, 103 min)
Dirección:
Lee Unkrich
Guión:
Michael Arndt
Intérpretes (v.o.):
Tom Hanks
Tim Allen
Joan Cusack
Michael Keaton
Timothy Dalton
Woopi Goldberg
Don Rickles
Definitivamente, John Lassseter es el Walt Disney moderno: ha dejado de dirigir para dedicarse a producir, lo que le permite supervisar todos los proyectos de Pixar y la animación de Disney. Para cerrar la trilogía de “Toy Story”, ha cedido el puesto a Lee Unkrich, que fue co-director de la segunda parte y ha trabajado en varios proyectos de la productora: montó “Toy Story”, “Bichos”, y “Toy Story 2”, y co-dirigió “Monstruos, S.A.”, y “Buscando a Nemo”. Eso es lo que se llama un buen currículum. Y ya puede ir haciendo hueco en sus estanterías para colocar el Oscar que ganará en marzo a la Mejor Película de Animación.
En “Toy Story 3” Andy ya tiene 17 años y está a punto de irse a la universidad. Su madre le pide que limpie el cuarto, y por una serie de malentendidos, sus juguetes, en vez de acabar en el desván, terminan en una guardería. El vaquero Woody sabe lo que ha pasado realmente y quiere volver con Andy, que es su dueño, mientras que el resto de los juguetes piensan que les tiró a la basura y deciden quedarse en la guardería.
Las dos primeras partes de “Toy Story”, a pesar de ser muy buenas e imaginativas, tenían algunas aristas. La segunda tardaba en empezar y al principio parecía una repetición de la primera, y la solución que daba Woody a Jessie y Perdigón era muy obvia; en la primera pasaba algo parecido con la ventana de la casa del vecino, de la que Woody no se daba cuenta hasta que no habían pasado varios minutos. Además, por aquella época Pixar todavía no sabía hacer algo que ahora domina: lograr que te enamores de los personajes; y por lo tanto, eran un poco más frías que las últimas películas de la productora.
En “Toy Story 3”, esos errores se han subsanado. El film prepara muy bien los momentos, complica la trama, y la cierra de forma satisfactoria con elementos plantados a medio camino, con un ritmo excelente de principio a fin. Estamos tan acostumbrados a la estructura de las historias, que sabemos que esa guardería de ensueño, al principio de una narración, tiene gato encerrado. Y en Pixar lo aprovechan muy bien.
Además, es imposible no sentir mucho cariño por Woody y sus amigos, y durante el metraje sufres con ellos. Las únicas pegas que le veo es que cuando Woody planea la fuga, le llega ayuda caída del cielo de un juguete con forma de teléfono; y que el muñeco bebé cambia muy rápido de opinión, justo en el momento apropiado.
La película está llena de momentos divertidísimos y muy imaginativos: el romance entre Barbie y Ken; las quejas de los señores Potato; toda la fuga, con momentos desternillantes de Mr. Potato; o los nuevos amigos que hace Woody, con ese erizo actor que se toma muy en serio (aquí hay un plano que me encanta, cuando muestran la cara de felicidad de Woody volando por los aires).
“Toy Story 3” tiene muchas referencias a las otras dos partes, pero no hace falta haberlas visto para poder disfrutarla, y no son repeticiones de acciones ya sabidas, porque les dan la vuelta. Como en las otras, los juguetes, por una confusión, salen de casa y tienen que volver a ella, pero aquí dan el giro de que son todos, y la mayoría no quiere volver. De nuevo juegan con las distintas personalidades de Buzz, y el resultado es hilarante. Los marcianitos siguen obsesionados con el gancho (y siguiendo esta idea, protagonizan unas de las escenas más emocionantes del film. Es un poco deux ex machina, pero tiene tanta emoción que funciona), y Jessie con que su dueña la abandonó.
Como en la segunda, comienza con una misión muy espectacular, pero a mí me gusta más ésta porque muestra cómo era la mente infantil de Andy. Ese comienzo, además, les permite cerrar el film con una escena muy emotiva que es un eco del principio, pero con un significado completamente distinto. Maravilloso final y maravillosa película.
“Toy Story 3” cierra la trilogía con su mejor capítulo, y es de las mejores de Pixar. Cine inmenso. Dudo que este año se estrene algo mejor.Calidad del blu-ray (31-1-2011):
Excelente. Es la primera película de Pixar que veo en blu-ray, y no noto diferencias, quitando las obvias del tamaño y las 3D, con la versión que vi en el cine. Los colores son muy vivos, los blancos y los negros tiene mucha profundidad, los detalles resaltan mucho y se ven perfectamente las texturas de todos los juguetes. Tanto en Blu-ray.com como en High-Def Digest hablan de leves problemas de aliasing (que los bordes se vean un poco pixelados) y banding (que se noten píxeles en los colores), pero no yo lo he notado. En esa páginas reconocen que tienes que fijarte muchísimo para notarlo.
He visto la versión británica, que NO tiene subtítulos ni doblajes en español.
Excelente. Es la primera película de Pixar que veo en blu-ray, y no noto diferencias, quitando las obvias del tamaño y las 3D, con la versión que vi en el cine. Los colores son muy vivos, los blancos y los negros tiene mucha profundidad, los detalles resaltan mucho y se ven perfectamente las texturas de todos los juguetes. Tanto en Blu-ray.com como en High-Def Digest hablan de leves problemas de aliasing (que los bordes se vean un poco pixelados) y banding (que se noten píxeles en los colores), pero no yo lo he notado. En esa páginas reconocen que tienes que fijarte muchísimo para notarlo.
He visto la versión británica, que NO tiene subtítulos ni doblajes en español.
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